El lugar de nuestra primer felicidad

Desde que nacemos necesitamos ser mirados por nuestros padres. Es una necesidad básica de cualquier ser humano: ser reconocido.
Ellos son nuestra fuente de fuerza.
A veces sucede que por distintas circunstancias, nuestros padres, no han podido mirarnos. A lo mejor estaban a nuestro lado, pero igual nos sentíamos solos. De a poco nos desconectamos de ellos, del entorno y hasta de nosotros mismos. Nos disociamos, vivimos en la cabeza, nos dispersamos, hacemos mil cosas, en automático. Te suena?
Aún así, siendo adultos es fundamental, reconocer y ejercer nuestro lugar de hijos porque siempre tendremos una mamá y un papá. Siempre serán nuestro origen, nuestra fuente de fuerza.
Seguramente estarás leyendo y diciendo: eso es difícil. Si, pero también es posible.
Más hijo sos, más fuerza tenés.
Más fuerza tenés, más sencillo será el camino de tu vida.
Más hijo/a SOS más felicidad sentirás, cómo cuando llegaste al mundo sabiendo que ellos son tus padres.
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